sábado, 3 de noviembre de 2012

EL DATO


El Elche le ayudó a ascender al Lugo hace 20 años


Los rojiblancos, tras ganar al Sant Andreu, tuvieron que esperar unos minutos a que el Extremadura no ganara en Elche, donde los ilicitanos estaban primados


El CD Lugo ascendió en 1992 por primera vez en su historia a las división de plata del fútbol español, gracias a sumar en aquella fase de ascenso 8 puntos, por 7 del Extremadura y del Sant Andreu. El último clasificado en aquel grupo fue el Elche, que acabó con sólo 2 puntos, uno conseguido ante el Lugo en su exilio de la vieja Condomina, y otro en la última jornada, al empatar (0-0) con el Extremadura, en un partido que le dio cierto suspense al que se jugaba a la misma hora, aquel domingo 26 de junio de 1992 en el estadio Ángel Carro, donde el Lugo consiguió imponerse al Sant Andreu (2-1). Con la victoria del Lugo ya obtenida, todavía hubo que esperar a que el Extremadura no hiciese lo mismo -el partido finalizó unos minutos más tarde-, ya que de vencer, sería el equipo extremeño el que se llevaría el premio del ascenso. Pero el equipo ilicitano jugó con un plus extra gracias a las primas que llegaron desde el Sant Andreu y desde Lugo, y a pesar de que el equipo de Almendralejo también llegó a ofrecer una prima al Elche por dejarse perder.

Al final el Lugo ascendió, no sólo gracias a un error de apreciación, involuntario, del colegiado Japón Sevilla, sino porque sumó más puntos que sus rivales y por la prima que jugadores y técnico habían negociado con los del Elche, que mantenían contacto con los rojiblancos a través del entonces entrenador, Julio Díaz, y el central Modesto Pillado, que supuestamente fue el encargado de entregar los cinco millones de pesetas al capitán del Elche, Puche -la mitad de la prima que cobraba por ascender la plantilla del CD Lugo y el cuerpo técnico-.

Por lo tanto, no parece muy lógico que se siga dudando de que el error de Japón Sevilla, en la injusta expulsión de Calderé, fue premeditado, aunque sí fue un error. ¿Cómo se entiende que un club pueda comprar al árbitro y no pagar la prima a un tercer equipo para que no se deje perder, cuando no se jugaba nada?. Sin duda que aquel ascenso de 1992 fue bastante tenso y amargo, pero lo peor fueron los minutos de espera en el Ángel Carro, para poder celebrarlo.

En la retina de muchos estaba todavía lo que le había sucedido el año anterior al Barcelona B, con el Lugo también presente en aquella película. Una última jornada de fase de ascenso en la que el conjunto azulgrana salió del vestuario después de empatar con el Lugo (0-0) para celebrar un ascenso que al final no se produjo. Un error de una emisora de radio al dar por finalizado el otro encuentro del grupo (Atl. Osasuna B - Mérida) también con empate a cero, hizo al saltar al césped a las promesas azulgranas -entre ellos Guardiola-, acompañados por su presidente -Bernabéu-, y su técnico Quique Costas. Pero finalmente, la noticia no era cierta, y un gol de penalti del Mérida en el último minuto cambió totalmente el cuento. El champán se cambió por lágrimas y el Lugo se fue del Mini Estadi con otra supuesta prima, también cercana a los cinco millones de pesetas, y supuestamente enviada por alguien cercano al equipo extremeño, aunque sin llegarse a comprobar.

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