miércoles, 21 de enero de 2015

Declaraciones de Luis Fernández, delantero del CD Lugo




CHARLA


Luis Fernández se siente orgullo de poder jugar en el CD Lugo, el principal equipo de su provincia



Entrevista a Luis Fernández
21/01/2015
El delantero lucense Luis Fernández es uno de los arietes del principal equipo de su provincia. Su pasado reciente está marcado por su facilidad goleadora con el Fabril y su papel protagonista en el último ascenso a Primera del Real Club Deportivo de A Coruña, el club al que pertenece.
Entrevista a Luis Fernández
¿Como lucense qué significa jugar en el Club Deportivo Lugo?
Es un orgullo jugar en el Lugo. Tenía claro desde un principio a donde quería ir. Tenía más posibilidades, pero en todo momento sabía que quería venir aquí. Como lucense y como aficionado al fútbol, el Lugo es un gran club, un club en crecimiento. Para lo que yo necesitaba era la mejor opción. Representar al equipo de mi provincia es un orgullo.
¿Qué le hace especial al Club Deportivo Lugo?
Cada equipo tiene sus cosas buenas y cosas malas. El Deportivo es un club histórico. En medios para entrenar, sí que es un club mucho más potente, pero lo que no se puede pagar es que en el Lugo la gente está muy pendiente de ti, es muy cercana, te muestra el cariño desde el primer momento vayan bien o mal las cosas. Eso es lo que más me llamó la atención. Ya me lo habían dicho, pero hasta que lo vives tienes una referencia. Hasta que lo vives no lo compruebas. Estoy muy contento de haber venido aquí. Darle las gracias a todo el mundo por la forma en que me recibieron.
¿Cómo te describirías como delantero?
Soy un jugador dinámico, que le gusta jugar con los compañeros. Quizás me encuentro más cómodo jugando con otro punta para, así, estar los dos en constante movimiento, fijar a la defensa, jugar entre líneas y con el equipo. Puedo jugar solo, como lo venía haciendo aquí en estos partidos.
¿Cuáles crees que son las facetas que debes mejorar?
Todas. Física, mental, técnica, todas. Siempre se puede mejorar. Cada persona tiene sus condiciones, debe potenciar sus virtudes y esconder los defectos. Debo potenciar el remate porque el delantero vive del remate. Estar todo el rato sin irte del partido, que es lo que hace fuerte a un futbolista. Estar preparado mentalmente para cualquier situación. Aprendí mucho, mejoré mucho. La situación del año pasado me ayudó muchísimo para esto. Soy un jugador más completo en este sentido, pero tengo mucho que mejorar. 
Diste un salto muy importante de Tercera a Segunda entre 2012 y 2014. En la temporada 2012/2013, marcas 27 goles en Tercera con el Fabril, filial del Deportivo de A Coruña, con seis goles en los playoffs. La campaña pasada tienes un papel protagonista en el ascenso del Dépor a Primera aportando cinco goles en Liga y uno en Copa en el segundo cuarto de competición. ¿Qué valoración realizas de este paso?
Fue un salto radical. Fue un cambio radical. Pasar de jugar en Tercera en un equipo como el Fabril donde la presión es nula, porque es nula, a competir en Segunda División en un equipo con muchos problemas económicos e institucionales y con la presión del ascenso a Primera fue un cambio radical en mi vida y, sobre todo, en mi forma de comportarme, de ser y de ver las cosas. Al principio, está claro que me costó muchísimo empezar a jugar bien; adaptarme al equipo; adaptarme al ruido, que fue lo más daño me hizo, quizás; y la desconfianza de tener que demostrar a toda una afición el porqué había dado un salto de Tercera a Segunda. Al principio, no fue positivo en el aspecto  futbolístico, pero en lo personal sí porque aprendí mucho. Eso me ayudó para después en mi mejor momento de la temporada estar fuerte. Tuve una oportunidad de jugar el día del Recreativo en Huelva, que me llegó por sorpresa. Ganamos 0-1 e hice un buen partido. A partir de ahí, fui titular. Jugué seis partidos como titular y obtuvimos buenos resultados, no porque haya yo jugado, sino porque el equipo estaba bien. Yo me sentía cómodo. En ese tramo fueron mis goles. Después, pasó algo que nunca lograré entender y no volví a jugar. Estoy muy contento de haber podido debutar en el Dépor, que era mi sueño, y ascender a Primera. Ayudé al equipo en lo que pude en subir a Primera. Aporté mi granito de arena. Aprendí mucho y estoy muy contento.
¿A qué jugador rival destacarías en Segunda en esta temporada y media que llevas en la categoría?
Me impresionó mucho Ayoze Pérez (ex delantero del Club Deportivo Tenerife). Es un jugador fantástico. De hecho, ahora está en la Premier League haciendo goles y haciendo disfrutar. Marcará las diferencias.
¿A quién citarías como el defensa rival más difícil?
Babin (ex de la Agrupación Deportiva Alcorcón y ahora en el Granada Club de Fútbol en Primera) por su fortaleza física. Es un jugador que me llamó bastante la atención. Pensé que era mucho más torpe con el balón de lo que es. Me gusta.
¿Cuál fue el jugador del Deportivo que más te impresionó jugar y entrenar con él?
A Pablo Insua ya lo conocía. Quizás, el que más me gustó y me impresionó mucho fue Bruno Gama en el mes y medio que estuvimos en pretemporada. Es un gran jugador. Después, Culio. No lo conocía, pero es otro gran jugador. Tiene un carácter que contagia a todo el equipo y nos daba la vida en el campo.
¿Cuál es el delantero de élite que siempre te gustó desde crío?
Ronaldo Nazario.
¿Por qué?
Porque un delantero que cada vez que llega a la portería, que va hacia el portero y sabes que va a ser gol eso es lo mejor. Puedes tener un compañero que haga regates, pero al final va hacia el portero y no sabes qué va a pasar. Van Nistelrooy me parecía una bomba. Cuando llegó al Real Madrid, pensé que no iba a dar el nivel que dio en el Manchester United. Cada vez que se plantaba delante de la portería era gol. No perdonaba. Eso es lo verdaderamente bueno del delantero: el remate. Ronaldo, cuando iba en el uno contra uno, jugaba con el portero. Era un espectáculo verle jugar por su potencia, por todo.
Te formaste en el fútbol sala. ¿Qué aprendizaje adquiriste para el fútbol once?
Yo iba a jugar y lo veía como una afición, simplemente. Entrenaba una vez por semana si es que entrenábamos. Yo jugaba en el Ural, en A Coruña, y fue cuando empecé a jugar al fútbol sala. En Burela nunca jugué al fútbol sala y en Burela se vivía el fútbol sala, como antes aquí en Lugo cuando el fútbol se dejaba un poco aparte. Es un deporte súper entretenido, súper dinámico, con velocidad de pensamiento, con transiciones de ataque-defensa que te ayudan a cambiar el chip cuando pierdes el balón y tienes que presionar. Tiene cosas, pero no lo puedes comparar con el fútbol. El fútbol sala es todo muy rápido, muchos goles, chuts. En el fútbol debes madurar más las jugadas, los equipos están más controlados. El campo es más largo y ancho y no hay esas transiciones. Es un deporte muy diferente.
¿Qué imagen te gustaría transmitir a la afición? Más allá de lo que aprecia viéndote jugar.
Yo podré gustar o no a la afición. A unos les gustaré y a otros no. Intentaré siempre hacerlo lo mejor posible, entrenar como un gran profesional, darlo todo salgan bien o mal las cosas. Soy honesto. Al hablar, soy una persona clara. No puedo esconder nada. Soy sincero. Que la gente sepa que por trabajo, sacrificio y ganas no va a ser. Eso no va a faltar. Después, las cualidades ya van en cada uno. 

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